mardi 28 janvier 2020

Secuencia

Mi presencia se ha tornado
como la cáscara de un huevo
puesto por una gallina de corral chino
enferma y sin poder caminar.

Toda la noche puedo estar de pie
tambaleandome
construyendo sobre un lodo
que se derrite
que se derrite
en el centro de la ciudad
en medio de las calles.

Nada tiene que ser fácil
y nadie tiene que hablar
en la posición más incómoda
sobre le lienzo amarillo.

Mi presencia se ha tornado
como las manías que voy reciclando
como lo que en algún lugar del mundo
necesitan
como el zarangoteo de mi lengua
como la estampida de las serpientes
enferma y sin poder caminar.

Toda la noche puedo estar de pie
observando escenas repetidas
construyendo sobre un cielo
que se derrite
en el centro de mi corazón
en medio de mis baterías.

Nada tiene que ser fácil
y nadie que por qué saberlo
en la posición más incómoda
sobre la luz amarilla.

Mi presencia en la mañana
es un perfecto equilibrio
entre mordisquear la maldad
e intentar conectarme a la mátrix.
Como la libélula que una vez robé del desierto
como las cuerdas de mis tendones
como el plástico reciclabe
que en algún lugar del mundo
necesitan.

Como final
como el final
como la musa
como la suicida
como la muñeca plástica
que no quiso conocer el Ritz
que no puede construir un final
que se derrite
en las ansias convulsivas
en medio de la noche.

Nada tiene que ser fácil
y nadie que por qué decirtelo
en la posición más incómoda
sobre la prensa amarilla.

Mi presencia nocturna
es una molestia constante
entre la más brillante explosión
y el final que no llega.

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire